La Caja

Madre de Dios que programa éste!!! Anoche la tele me atrapó y lo peor es que no tenía nada que ver con mi vida, sino con ese negocio insano que es el "cotilleo" o descubrir los aspectos escabrosos de los demás. Una caja roja, que interactúa con el que está sentado y le descubre los aspectos de su vida a los que tienen miedo o fobia, y una advertencia, ¡gracias a Dios!, "que no se haga en casa sólo y sin consejo de un psicólogo".
Francamente, el tema de los psicólogos me trae ahora un poco de vuelta. Cuando uno acaba de estudiarse una y mil teorías sobre el pensamiento y la educación ya no sabe ni donde tiene la nariz, y empieza a acordarse de la familia de todos los psicólogos y pensadores de la historia... ¡por muchos que sean! Pero no puedo negar su utilidad, y su capacidad para extraer aquello que nos hace daño o nos asusta.
En fín, como programa, parace sencillo. Mínimos recursos, unas tres cámaras que dan vueltas, controladas por control remoto y cuatro paneles con la proyección de las imágenes más adecuadas. Evidentemente, el personal psicológico debe de ser numeroso y se observa una gran capacidad de estudio de cada caso y una gran entereza para saber cómo controlar la situación en la caja. No olvidemos que las personas somos impulsivas y no tenemos por qué escribir sobre unas pautas establecidas...
¡En fín! Sí que es cierto que por "La Caja" deberían pasar muchas personas, pero, ¿y esa necesidad de pasar por ella ante toda España? ¿Es como la necesidad de escribir este blog para que todo el mundo sepa lo que piensas? Ajá, quizás sea esa la cuestión, nuestras ganas de estar expuesto siempre a lo que los demás digan o piensen de nosotros...
Bueno, pues estas son las reflexiones de la mañana...